Hoy se ha nublado para llorar

Después de tantos años buscándole una respuesta al "por qué" de todo, encontré alguna paz dentro de mí. En algún rincón de mi ser, la sed de venganza cesó. Pude dejar en paz aquellos dolores incesantes, las lágrimas dejaron de caer y pude ver más allá. Te dejé ir.

Te veo sentado en la puerta del local, con tu camisa favorita y los mates amargos acompañándote. Sonriente y feliz disfrutando del día. Junto a los seres queridos que se fueron a reunirse con vos. Te veo y sonrío. Titubeo para llorar pero dentro mío sé que estás feliz. Que te gusta observarme y cuidarme. Esperas tranquilo, sentando y sin borrar tu sonrisa. Aquella sonrisa que nunca nadie podrá matar en vos. Ésa que en los peores momentos siempre estuvo para mí. A tu lado no puede faltar el Benji, tu fiel amigo el Benji. ¡ Cómo se enfermó después de que fuiste ! Pero ves, ahora están juntos para toda la eternidad.

A veces, cuando no puedo dormir, pienso en vos. Cierro los ojos intentando dormir y te veo abrazándome. Me llena el alma, el espíritu y el cuerpo de energía cada vez que te siento cerca mío. Aunque de momentos me come el rencor, sé que todo llega a su tiempo. Silenciosamente, la justicia llega para todos y los que mataron un sueño, pagarán por ello. Aprendí a vivir con ello, con lo bueno y lo malo que eso trae, pero aprendí a vivir la vida por más dura que sea. Tu partida ayudó a crecer mi personalidad pero también me hizo ser la persona más frágil. Si algo está mal, solo cierro los ojos y deseo que estés conmigo. De algún modo. No lo estás, veo a mi alrededor y no estás. Nunca volverás a estar. Están esas personas nuevas que iluminaron mi corazón y que nunca dejarán morir esa llama que quedó dentro de mí. Gracias a vos, nunca hubiese llegado a donde llegué y sé que más aún me queda por recorrer. Sé que en cada paso, estás a mi lado, protegiéndome.

No te preocupes, vos seguí tomando mates, mi viejo querido. Sentate y charla con tus viejos amigos. Reíte, mostrá y lucí tus dientes felices. Demostrale a los demás que nadie te sacó la luz de tu alma y hacela brillar en el lugar más oscuro del mundo. Que brille dentro de mi corazón. No dejés que esa llama muera. Pasame un mate y veamos juntos, el mundo girar.